Es el punto más alto de la Cuesta del Obispo, a 3.457 msnm. En este lugar se encuentra la pequeña Capilla de San Rafael y una piedra de moler tallada en granito de varias toneladas, que le da nombre al lugar. Se cuenta que, en el año 1.927, esta piedra era transportada en carro y debido a su gran peso, se partió en dos. Estaba destinada a una estancia del valle, y sus dueños, jamás volvieron por ella.

La Piedra del Molino es un mirador con la vista más espectacular de la Cuesta del Obispo, uno de los paisajes con las fotos más lindas del recorrido, en el que sin dudas vale la pena detenernos.