Cuando el Cabildo de Mendoza conoció la designación de San Martín como Gobernador Intendente, dispuso una casa donde pudiera alojarse con su familia. Dicha propiedad pertenecía a la Familia Álvarez, una reconocida familia de la sociedad mendocina de la época. San Martín habitó en esa casa junto a su esposa, Remedios Escalada de San Martín y en ella nació su hija Mercedes, el 24 de agosto de 1816.

La casa fue destruida por el terremoto de 1861 y posteriormente el solar fue declarado Lugar Histórico Nacional.