Las Bóvedas son curiosas construcciones de adobe, con techo en forma de cúpula ojival que podrían haber servido como trapiche o como fortaleza militar. Una versión más generalizada las identifica como construcciones de finales del siglo XVIII, utilizadas como plantas para el tratamiento de los minerales que eran extraídos de las minas coloniales de San Lorenzo. Las Bóvedas fueron atribuidas a la obra de los jesuitas, y son consideradas uno de los pocos conjuntos mineros coloniales con hornos, acueductos y molinos, además de otras herramientas utilizadas también para el laboreo de minerales, principalmente zinc y plata.

El conjunto fue transformado en un museo que encierra un interesante patrimonio arqueológico, sanmartiniano y mineralógico, distribuido en cuatro salas: Cultura Indígena, Fundición, Mineralogía y Sanmartiniana. En ellas pueden apreciarse elementos indígenas, objetos de herrería, minerales y metales de la zona y maquetas.