A 137 km al oeste de la Ciudad de San Rafael y a 51 km al norte de la Ciudad de Malargüe, se encuentra la localidad de El Sosneado, actualmente punto de encuentro entre la ruta 40, la ruta provincial 220 y el Río Atuel. Este circuito es operable en los meses cálidos, de noviembre a marzo. El Sosneado, que significa “donde primero se ve el sol”, es un pequeño paraje, en una zona cordillerana de más de 60 millones de años de antigüedad, surcado por las aguas del Río Atuel y rodeado por la Cordillera de Los Andes, invitando a disfrutar de su extrema serenidad y la aventura. Según el cartel que se encuentra en la estación de servicio, El Sosneado está en el km 3.000 de la Ruta 40; ese cartel es un clásico para una foto.

El Sosneado es una mezcla sorprendente que conjuga los más diversos paisajes: volcanes inactivos, aguas y vertientes termales, donde la naturaleza agreste se convierte en un paraíso, ideal para desarrollar actividades al aire libre como trekking, cabalgatas, mountain bike y andinismo superior.

Sobre la ruta 40 y antes de ingresar al sendero de montaña, existe una estación de servicio, que ofrece provisiones (excelentes fiambres y embutidos), productos regionales y excursiones. A partir de allí, un camino consolidado apto sólo para vehículos altos o camionetas 4×4, que bordea el río Atuel, lleva al visitante hasta los atractivos de El Sosneado.

Quienes decidan ir por su cuenta, deben recorrer el camino consolidado con muchísima precaución porque es muy complejo y peligroso para vehículos que no sean 4×4. Nosotros nos volvimos a los pocos kilómetros de iniciar el camino, porque no contábamos con el vehículo apropiado. Lo positivo de esto es que tendremos que volver…siempre es bueno dejar en cada lugar algo para conocer y tener excusas para regresar.

La foto que acompaña este post fue tomada en la ruta provincial 220 al noroeste de El Sosneado, justo aquí.