Se ubica en el barrio del mismo nombre. Sus orígenes se remontan al siglo XIX, cuando fue uno de los primeros balnearios de América del Sur. Actualmente es una importante zona residencial, con su característico paisaje costero bordeado por altos edificios. Es también una de las playas montevideanas más visitadas por los veraneantes, gracias a sus excelentes servicios y su cercanía al centro de la ciudad.

Tiene olas claras y suaves, ideales para baño, y las arenas son limpias todo el año. Durante los meses de verano hay actividades deportivas, pero durante los meses fríos, la Rambla de la Playa Pocitos es uno de los paseos clásicos de la ciudad, muy usado por patinadores y ciclistas, que aprovechan la vía exclusiva. Además, tiene una amplia propuesta gastronómica sobre su Rambla.

En esta playa se encuentra uno de los carteles de Montevideo, donde se obtiene la clásica foto de la ciudad.