Su nombre original es Iglesia de la Inmaculada Concepción y San Felipe y Santiago de Montevideo, pero se la conoce como Iglesia Matriz por ser la primera iglesia de la ciudad.

El edificio original, construido en ladrillo, se inauguró en 1740. En 1785 se derrumbó parcialmente y hubo que pensar en la construcción de una nueva iglesia. El 20 de noviembre de 1790 se colocó la piedra inaugural del nuevo edificio, el cual se terminó de construir en 1804.

Desde su inauguración, la Iglesia Matriz sufrió diversas modificaciones y reparaciones. En 1878 fue declarada Catedral y en 1897 el Papa León XIII la elevó a la categoría de Basílica Metropolitana, con lo que se convirtió en la principal iglesia del país.

Está inspirada en el estilo neoclásico español. Su planta tiene tres naves con un crucero y la cúpula está apoyada sobre un tambor cilíndrico. Un pórtico lateral permite el acceso a la capilla del Santísimo, la cual tiene planta circular y está techada con una cúpula.

En el interior de la Catedral se encuentran las tumbas de algunas de las personalidades relevantes de la historia uruguaya. También descansan combatientes que murieron durante las invasiones inglesas, además de numerosos religiosos.