La visita a Moray brinda una idea de los avanzados sistemas que desarrollaron los incas para sus cultivos en pendientes. Se cree que este sistema de andenes fue usado como un laboratorio para experimentar con el comportamiento de ciertos cultivos y para adaptar plantas que no pertenecían naturalmente al riguroso clima andino.

Moray es un complejo de andenes concéntricos construidos en tres sistemas en las épocas preinca e inca. Las terrazas se adaptan a la pendiente de las laderas del cerro Waninmarka, donde se asientan. El sistema más grande está formado por 12 andenes concéntricos alrededor de una planicie interior.