Esta piedra, llamada Pedra de Moleque, marca el punto donde termina la Playa del Amor y comienza la Playa de Minas. Cuenta la leyenda que esta piedra, vista a la distancia por los navegantes portugueses durante siglos, dio el nombre de Pipa a este sitio, ya que la piedra tiene la forma exacta de un barril (también conocido como pipa). Además de formar parte de la historia de Pipa, esta piedra también es protagonista de diversas leyendas locales, como por ejemplo, la que cuenta que en ella se esconde una enorme serpiente.